web de la asociación de madres y padres de alumnos

Etiqueta: 2019

Ahh… ¿La visión interfiere en el aprendizaje?

Sí, lo hace y mucho. Hoy traemos este artículo de Gloria Gómez que nos va a aclarar mitos sobre ella explicando puntos de interés de nuestra vida cotidiana.

VISIÓN es una palabra cuyo significado esconde mucho más de lo que a priori parece. Vamos a desgranarlo y a diferenciarlo de otra palabra con significado «parecido»: VISTA.

  • VISTA: capacidad de ver con detalle un objeto, sinónimo de agudeza visual (AV).
  • VISIÓN: capacidad para ver, procesar e interpretar lo que estamos viendo de una manera óptima y eficaz.

Este proceso necesita de una buena agudeza visual, un buen funcionamiento de las vías visuales (desde el ojo hasta el córtex visual) y de una interpretación correcta por parte de todas las áreas cerebrales implicadas en la visión. Es decir, necesitamos ver bien, y que el cerebro entienda lo que ve para poder darle un sentido a lo que tenemos delante de nosotros.


¿Tenemos una buena visión?

En las revisiones habituales, nos enseñan una pantalla con letras, nos preguntan hasta dónde llegamos a ver nítido y, según esta respuesta, gradúan para compensar defectos refractivos (miopía, hipermetropía y/o astigmatismo) que impidan alcanzar una buena AV y por tanto tener una «buena visión». Estas revisiones son incompletas.

Si llegamos a ver el 100 %, ¿¡enhorabuena!? Parece que mis ojos funcionan genial, pero falta mucha información por saber.

Lo correcto es realizar una exploración completa. En primer lugar, hay que descartar cualquier patología de la vía visual, de lo cual se encarga el Oftalmólogo.

Lo segundo es cerciorarnos de que la vía es funcional desde los ojos (órgano receptor) hasta el córtex visual, observar si existen interferencias que afectan al comportamiento, a las relaciones con el entorno, al aprendizaje, etc. Este profesional es el Optometrista comportamental.

Ya podemos hacernos una idea de que tener una buena agudeza visual no implica que el sistema visual esté funcionando de una manera correcta.

Pero, si además conocemos los siguientes datos:

  • Más del 70 % de la información que recibimos es visual. Hacia los 3 años (edad a la que normalmente se escolariza a los niños) la percepción sensorial visual es la que más información nos da del entorno.
  • No nacemos con el sistema visual completamente desarrollado; al igual que el sistema motor del bebé tiene que madurar, por ejemplo, para conseguir, entre otros hitos, la bipedestación o, en el caso de la visión, la binocularidad. Es decir, es un proceso de neurodesarrollo, al igual que tienen que aprender a moverse, tienen que aprender a ver, y este proceso es conjunto. Sin movimiento no hay experiencias sensoriales por lo que la maduración y el aprendizaje serán de peor calidad.
  • Disfunciones visuales causan al menos 1/3 parte del fracaso escolar.


El papel de la visión en el aprendizaje

Por los datos anteriores, podemos sospechar que es, al menos, importante. Un buen desarrollo de las vías visuales nos va a permitir que la información que nos llegue lo haga de manera rápida, eficaz, sin interferencias y que a nivel del córtex visual se procese e interprete de manera óptima, decodificando de manera correcta los símbolos de la lecto-escritura, dándole un significado a lo que lee y ve. No podemos olvidarnos de la relación con el entorno, el cálculo de distancias, el control espacial, etc.

Por lo tanto, si existen interferencias en la entrada de información (sistemas sensoriales), en el procesamiento de la información o en la respuesta que el sistema nervioso central genera, el aprendizaje no será óptimo.

¿Qué condiciones desfavorables podemos encontrarnos?

  • Ametropía (miopía, hipermetropía o astigmatismo)
  • Disfunción acomodativa o de convergencia
  • Disfunción en la motilidad ocular
  • Ambliopía (ojo vago)
  • Estrabismo
  • Dificultades en la percepción visual (aprendizaje)
  • Diplopía (visión doble)

Las revisiones visuales completas son necesarias desde pequeños, tenemos que asegurarnos de que su sistema visual está preparado para vivir experiencias únicas y de calidad todos los días.

Esguinces de rodilla y tobillo en niños

Volvemos a contar con los expertos del centro Itramed de Logroño, para conocer algo más en profundidad los esguinces de rodilla y tobillo en la práctica deportiva de nuestros hijos.

Los niños tiene incluidas las actividades deportivas dentro del colegio, y en ocasiones como actividad extraescolar. Muchas son las opciones de actividades deportivas que realizan baloncesto, fútbol, voley, balonmano, tenis, etc. Y toda ellas implican una actividad vigorosa con saltos, giros, carrera, dribling, pivotes…

De forma habitual los niños sufren caídas y golpes de los cuales se recuperan sin ningún problema, todo lo contrario a si lo sufriéramos nosotros.

Muchas son las ocasiones en las que sufren esguinces, de forma más frecuente en tobillos y rodillas. Un esguince a nivel fisiológico es una distensión de los ligamentos que sujetan la articulación provocada por un movimiento brusco o forzado.

Los niños tienen una mayor capacidad de regeneración y curación de los tejidos en comparativa a los adultos, por lo que la mayoría de veces son capaces de olvidar esa pequeña lesión pasadas unas semanas.

Cuando un niño sufre un esguince y tras unas semanas continua con molestias, hinchazón y limitación para la realización de aquella actividad deportiva que realizaba, es cuando nos tenemos que preocupar y hacer que un especialista valore a nuestro hijo.

ESGUINCES DE TOBILLO

El esguince de tobillo es definido como una lesión aguda producida por la distensión de los ligamentos de la articulación o la cápsula articular.

El tobillo es con más frecuencia la articulación que más se torsiona o sufre un esguince

Los ligamentos que rodean la articulación del tobillo aportan una estabilidad o «sujección» articular, favoreciendo un movimiento lineal de la articulación y evitando microtraumatismos o «traqueteo articular».

Cuando un esguince agudo pasa a convertirse en un esguince frecuente en la misma articulación se convierte en un esguince crónico. Esto de forma habitual ocurre porque los ligamentos que han sido dañados en varias ocasiones y su capacidad de tensión se ha perdido, por lo que la articulación se vuelve más laxa e inestable.

El niño de forma habitual suele quejarse de dolor o molestias tras realizar actividad deportiva en ese tobillo.

Y, ¿es bueno que el niño tenga la costumbre de doblar lateralmente los tobillos cuando está descansando o de pie? Sabemos que en esta posición se favorece la distensión de los ligamentos laterales del tobillo, lo cual contribuye a que la propiedad de sujeción que tienen los ligamentos la pierdan al tener mayor laxitud esos ligamentos y favorezcamos la aparición de nuevos esguinces.

¿Se puede recuperar la capacidad de sujeción de esos ligamentos favoreciendo la estabilidad del tobillo y disminuyendo la posibilidad de sufrir esguinces? En estos casos en los que el tobillo se encuentra muy laxo y el niño sufre esguinces con gran frecuencia en la misma articulación, el tratamiento que realizamos consiste en retensar los ligamentos mediante inyecciones ecoguiadas de una sustancia farmacológica que provoca una retracción fisiológica de los ligamentos dañados, sin necesidad de cirugía y en tres sesiones.

ESGUINCES DE RODILLA

Los esguinces de rodilla en niños están provocados por traumatismos de forma más frecuente en deportes de contacto tipo fútbol, baloncesto o balonmano, o en forma de torsiones, como en el tenis, padel o voley. De forma habitual un esguince de rodilla en un niño de una semana de evolución con dolor e incapacidad de realizar la actividad deportiva habitual es motivo de valoración por un especialista.

Es frecuente la historia de un niño o adolescente que sufre una lesión de rodilla realizando su actividad deportiva y pasa desapercibida como “un esguince de rodilla”. Dicha lesión ocasiona una rodilla inestable que en los meses y años sucesivos, mientras termina el crecimiento, va provocando episodios de inestabilidad de la rodilla que con el tiempo origina el aumento de las lesiones en dicha rodilla (lesiones en los meniscos y lesiones a nivel de la superficie del cartílago). La capacidad de recuperación y de reparación de estas estructuras es mucho más difícil que si se hubiera evitado con un diagnóstico y tratamiento temprano para solucionar el problema de la inestabilidad.

Tradicionalmente se sostenía la creencia de que cuando un niño o adolescente, que todavía no había terminado su crecimiento, sufría una lesión de rodilla, la mejor opción era esperar a que terminase el crecimiento y alcanzar la madurez esquelética para así realizar una técnica propia de los adultos. Sin embargo, en los últimos años los estudios han demostrado y han puesto de manifiesto el hecho de que dejar sin reparar una rodilla lesionada en una persona en crecimiento conlleva un número de lesiones posteriores mayor que en los casos en los que se realiza un tratamiento temprano de dichas lesiones.

En estos casos es de máxima importancia un diagnóstico precoz y rápido de las diversas lesiones que se producen en la rodilla, dado que esto nos va a permitir un tratamiento adecuado, un mejor resultado y una recuperación más rápida.

Si existe una lesión de ligamentos, ¿cómo se trata?

De forma inicial hace falta conocer cuál es el grado de lesión de los ligamentos, de tal forma que puede encontrarse una rotura completa, parcial o distensión. Tras haber concretado en qué situación se encuentran los ligamento siempre se intenta realizar tratamientos más conservadores si es posible.

En el caso de existir una distensión de ligamentos o rotura parcial el tratamiento consiste en el retensado de los ligamentos mediante inyecciones ecoguiadas de una sustancia farmacológica que provoca una retracción fisiológica de los ligamentos dañados, sin necesidad de cirugía y en tres sesiones. El procedimiento se realiza in cirugía ni hospitalización.

En el caso de existir una rotura completa de algún ligamento la indicación es la reparación quirúrgica del mismo, intentando en primer lugar realizar un anclaje del mismo ligamento roto en su parte más proximal y sino sustituyendo el ligamento. Este procedimiento si que necesita de cirugía artroscópica e ingreso.

¿A partir de qué edad se puede operar una lesión de ligamentos de la rodilla?

Tal como hemos comentado anteriormente, la edad no es el problema, lo importante es elegir el tratamiento adecuado a realizar y adaptarlo a la edad del paciente. Lo realmente importante es estabilizar esa rodilla inestable lo antes posible para prevenir y evitar que se produzcan nuevas lesiones sobre el resto de estructuras de la rodilla.

Resulta francamente imposible intentar restringir la actividad después de una lesión a un niño o adolescente en unas edades en las que lo que más desean es tener una actividad física intensa y estar habitualmente implicados en actividades deportivas de impacto como fútbol, baloncesto, balonmano u otras actividades deportivas de menos impacto pero que suponen movimientos de giro para la rodilla, como la mayor parte de los deportes de raqueta.

Si lo que se lesiona son los meniscos, ¿La técnica a utilizar depende también de la edad del paciente?

En los pacientes más jóvenes la rotura de los meniscos suele ser secundaria a un traumatismo y en ellos la capacidad de cicatrización de los tejidos es mayor que en los adultos. Por eso siempre se deberá intentar la reparación de los meniscos aún cuando técnicamente sea más difícil que el hecho de recortar o resecar un trozo de menisco.

Cuidado bucal adecuado en nuestros hijos

Hoy nuestro artículo llega de la mano de la higienista Elena Somovilla de la clínica Aviden.

Como padres debemos encargarnos de enseñar a nuestros hijos una correcta higiene bucal, acostumbrarlos a crear el hábito de cepillarse los dientes, dándoles ejemplo con nuestro propio hábito y acompañarlos a las revisiones del odontopediatra cuando son niños para que quiten el miedo al dentista.

Con una buena higiene, visitas periódicas al dentista y una alimentación correcta evitaremos futuras enfermedades de la cavidad oral como caries, gingivitis, periodontitis, halitosis… Y también enfermedades del sistema digestivo, cardiaco e incluso inmunológico.

La dentición de los niños se forma antes de nacer. Empiezan a brotar en los bebes sobre los cuatro meses, y para los tres años ya tienen la dentición temporal con las 20 piezas de leche. Aun así cada niño es diferente y el ritmo de erupción puede variar.

A partir de los seis años empiezan a recambiar la dentición por la permanente hasta los 21 años aproximadamente que se presentan los terceros molares o muelas del juicio.

Para ayudar a tus hijos a tener una buena higiene y salud oral debes inculcar los siguientes hábitos importantes:

.-Limita al máximo el consumo de azúcar para prevenir la caries. Sobre todo los altamente cariogenicos como gominolas o tofes.

.-Fluorizaciones. Revisa el fluorado de las aguas de tu zona, indica a tus hijos que beban agua con un contenido de flúor aceptable y haz que reciban un tratamiento de fluorización extra en el odontopediatra para fortalecer el esmalte y prevenir las caries si el agua no contiene el flúor adecuado. No dudes en preguntar al profesional la necesidad de un aporte extra de flúor.

.-Insiste en la higiene bucal diaria de tus hijos. Ayúdales a que sea un habito tres veces al día, después de cada comida y añádele también el uso de la seda dental al cepillado. Es la rutina de salud bucal más apropiada

Aun así hay obstáculos que se nos presentan con nuestros hijos a la hora de enseñarles una buena higiene

Cuando nuestros hijos son bebes se nos plantean problemas como las caries denominadas de biberón, para evitarlas limpia la boca de tus hijos con una gasa o paño limpio empapado en agua y cuando los dientes empiezan a erupcionar límpialos con un cepillo y una cantidad de pasta con flúor del tamaño de un guisante. Impregna el chupete de tu bebe en agua, nunca en leche, zumo o azúcar.

La succión o el hábito de chuparse el dedo. Consulta a los proveedores de productos de salud pediátrica para que estos productos tengan funciones de aprendizaje y desarrollo. Aunque debieran ignorarse durante los primeros años de vida. Consulta a tu dentista sobre los hábitos de succión de tu hijo

Pueden aparecer manchas blancas en los dientes recién erupcionados por descalcificaciones o bajo nivel de flúor, límpialos a diario para evitarlas y consulta a tu odontopediatra.

En niños pequeños el principal problema es el miedo al dentista, debemos crear el habito de la visita al odontopediatra cuanto antes y acompañar a nuestros hijos para que se sientan seguros y protegidos.

Para crear una rutina de higiene debemos crear un ejemplo implicando a toda la familia y convirtiéndonos en un modelo a seguir por nuestros hijos, por ejemplo cepillándonos juntos todos los días para que la higiene se convierta en una rutina

Consulta a tu medico antes de que le recete cualquier antibiótico para evitar la aparición de manchas

En los niños en edad escolar nuestro principal caballo de batalla será la afición por los dulces, debemos evitar la bollería industrial y el consumo excesivo de azúcar, remplazándolo por frutas, queso o yogures

También pueden presentarse lesiones causadas por el deporte, para lo que deberán utilizar protectores durante la práctica de determinados deportes para evitar posibles accidentes.

En adolescentes la higiene se convierte en una lucha diaria ya que la rebeldía propia de esta edad hace que nuestros hijos no nos hagan caso, debemos tener paciencia e insistir en la rutina de higiene. Esta suele ser la edad en la que mas tratamientos de ortodoncia se colocan, así que si nuestro hijo lleva brackets la higiene se tiene que multipilicar para evitar caries y enfermedades periodontales.

CONSEJOS BASICOS PARA UNA ALIMENTACION SANA EN NIÑOS

En los últimos años se ha disparado de forma alarmante la obesidad infantil. Esta en nuestra mano crear una alimentación saludable para evitar problemas como este y para alcanzar una buena salud para nuestros hijos, evitar diabetes, problemas cardiacos, colesterol, y una correcta salud oral.

Darles a nuestros hijos una alimentación equilibrada, sana y variada no tiene por qué suponer una dificultad para una familia. Además puede ser agradable, sabrosa y divertida.

Para una alimentación óptima debemos

1.-hacer 4 o 5 comidas diarias

2.- Darle importancia a un desayuno saludable. Incluyendo en el lácteos, cereales y fruta

3.- Repartir los alimentos a lo largo de la semana

4.- La comida principal y la cena debe contener verduras, cereales, tubérculos y legumbres, proteínas. Y como postre fruta o lácteos.

5.- Evitar o suprimir bollería industrial, caramelos, pasteles….

Con estos sencillos consejos, un poco de paciencia, alguna concesión y poniéndonos siempre como ejemplo conseguiremos unas pautas de higiene oral y alimentación sana y correcta que ayudara a alargar la buena salud de nuestros hijos.

Os recordamos que en nuestra sección colaboradores podéis encontrar las ventajas del AMPA en la clínica.